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Cancionero

Cancionero

Cancionero

 

Del Libro Almanaque Escuela Para Todos 2011


 

 

CLAVEL DE PRIMAVERA
Eres más linda que un clavel de primavera
con el que adornas tu preciosa cabellera,
son tus ojitos que parecen dos estrellas
y tu boquita es del color de la cereza.

Cuando te miro el corazón se me alborota
y siento cosas que nunca sentí por otra,
hasta dormido yo te sueño y se me antoja
darte un besito en esa boca que provoca.

Tú eres la dueña de mi amor y yo seré tu adorador
y te daré mi corazón cuando tú quieras,
es mi delirio tu color, eres más bella que una flor
eres más linda que un clavel de primavera.

Eres bonita y por bonita yo te quiero
por tu cariño noche a noche me desvelo,
solo mirando las estrellas me consuelo
se me figuran tus ojitos en el cielo.

Yo solo quiero nada más un lugarcito
allá en el fondo de tu fiel corazoncito,
que me dejaras que te hiciera un cariñito
y que me dieras de tu amor solo un poquito.

Tú eres la dueña de mi amor y yo seré tu adorador
y te daré mi corazón cuando tú quieras,
es mi delirio tu color, eres más bella que una flor
eres más linda que un clavel de primavera.


INDITA MIA
Indita mía, si no me quieres,
indita mía, ten compasión.
Mira que el hombre que te idolatra
se encuentra herido del corazón.

Por qué te ocultas cuando te miro,
por qué te ocultas mi vida sí.
Cuál es el crimen que he cometido,
haberte amado nomás a ti.

Soñé que un ángel su amor me daba,
y que yo en cambio mi amor le di.
Él me juraba que me adoraba,
yo con el alma se lo creí.

Bajo las sombras de aquella noche,
mis desengaños voy a ocultar.
Para que nadie sepa que te amo,
cuando de amores me oigan cantar.

Toda mi vida yo he sido franco,
y siempre he hablado con la verdad.
Y desde luego que no hay motivo,
para que perdamos la amistad.

Indita mía, si no me quieres,
si no me quieres ten compasión.
Mira que el hombre que te idolatra,
se encuentra herido del corazón.


EL MUCHACHO ALEGRE
Yo soy el muchacho alegre
que me amanezco cantando
con mi botella de vino
y mi baraja jugando.

Si quieren saber quién soy
pregúntenselo a Cupido
yo soy el muchacho alegre
del cielo favorecido.

Con una baraja nueva
los quisiera ver jugar
a ver si conmigo pierden
hasta el modito de andar.

Eres como la sandía
tienes lo verde por fuera
si quieres que otro te goce
pídele a Dios que me muera.

No tengo padre ni madre
ni quien se duela de mí
solo la cama en que duermo
se compadece de mí.

Ya con esta me despido
a orillas de un campo verde
aquí se acaban cantando
versos del muchacho alegre.


CAMINO AL CIELO
A todos los que dicen que
el dinero es toda la felicidad.
A todos los que dicen que
el dinero todo lo puede lograr.

Les juro que es mentira
les juro que es mentira.
Hay cosas en la vida que
el dinero nunca las podrá comprar.

Digan quién ha visto
un signo de pesos
que le ponga precio
a la vida y al tiempo.

Digan quién me vende
para regalarles
una nueva vida
a mi madre y a mi padre.

La pobre de mi madre
se durmió pensando
en un nuevo mañana
y ver su sueño realizado.

Una casita blanca
rodeada de pinos
para mirar crecer ahí
a los hijos de sus hijos.

Un ranchito en el campo
con milpa y ganado
fue lo que tantos años
añoró mi padre.

Dinero maldito
ahora que te tengo
de nada me sirves
si ya no tengo a mis viejos.

Ya mi padre y mi madre se fueron
tomados de la mano
por el camino al cielo.
Ahora que tengo todo
lo que para mí quisieron,
qué ironía de la vida
ya no los tengo a ellos.

Ya mi padre y mi madre se fueron…


MI GUSTO ES
Mi gusto es y quién me lo quitará,
solamente Dios del cielo me lo quita.
Mi gusto es el amarte jovencita.
Topé en eso, topé en eso
que al cabo mi gusto es.

Pero jovencita yo te he de seguir amando,
mi gusto es, pero chaparrita yo te he de seguir los pasos
en donde estés aunque me den de balazos.
Topé en eso, topé en eso
que al cabo mi gusto es.

Pero jovencita yo te he de seguir amando,
mi gusto es, pero chaparrita yo te he de seguir los pasos
en donde estés aunque me den de balazos.
Topé en eso, topé en eso
que al cabo mi gusto es.


A LA LUZ DE UNA VELA
A la luz de una vela de cera
me he sentado a escribir estas letras.
Y aunque estén un poquito mal hechas
lo que digo son cosas muy ciertas.

En un tren pasajero se ha ido
una joven que mucho adoraba.
No me llamen un hombre cualquiera
al decir que por ella lloraba.

Recargado en un poste miraba
como el tren por la vía se alejaba.
Me sentí solo, triste y perdido,
¡y ay qué tarde friolenta y nublada!

Yo me fui a la primera cantina
y me bebí muchas copas de vino.
Yo no sé maldecir ni maldigo
pero allí renegué del destino.

Desde aquella cantina miraba
dos pañuelos que ondeaban muy lejos.
Talvez era el cristal de las copas
o del vino talvez un reflejo.

Yo salí por las calles oscuras
no miraba brillar ni una estrella.
Y una nube de llanto en mis ojos
me cegó aquella noche por ella.

A la luz de una vela de cera
me he sentado a escribir mis recuerdos.
Todavía no descuelgo el retrato
dedicado por su puño y dedo.

Y a la luz de una vela les firmo
lo que tanto he guardado en secreto.
Salgo en mi juicio y regreso borracho
porque amor como aquel no lo encuentro.


PADRE NUESTRO
Padre nuestro que estás en el cielo
hoy que mi alma necesita fe
ven a darme la paz y el consuelo
que hace mucho tiempo
por ahí dejé.

Reconozco lo malo que he sido
hoy arrepentido te pido perdón
me desprecio porque en mi pasado
te ofendí por vivir en pecado
hoy arrodillado te llamo Señor.

Devolví siempre golpe por golpe
y jamás conocí la humildad
por mi orgullo me porté muy torpe
nunca a nadie le tuve piedad.

Hoy te ruego me des fuerza y calma
para perdonar al que me humilla.
En vez de ofenderte partiéndole el alma
ofrecerle la otra mejilla.
En vez de ofenderte partiéndole el alma
ofrecerle la otra mejilla.

Devolví siempre golpe por golpe
y jamás conocí la humildad
por mi orgullo me porté muy torpe
nunca a nadie le tuve piedad.

Hoy te ruego me des fuerza y calma
para perdonar al que me humilla.
En vez de ofenderte partiéndole el alma
ofrecerle la otra mejilla.
En vez de ofenderte partiéndole el alma
ofrecerle la otra mejilla.


NUBE VIAJERA
Ay amor, aquí estoy preso de tu recuerdo en mi soledad,
ay amor, son tantos años y no hay remedio para mi mal.
Ay amor, estoy vencido, no tengo fuerzas para luchar,
ay amor, no cabe duda que sigo siendo sentimental.

Dónde estás, qué cielo cruzas sin extrañarme nube perdida,
por qué no vienes a iluminarme luz de mi vida,
regresa pronto que yo no vivo si no es por ti.

Dónde estás, detén tu vuelo y vuelve a casa nube viajera,
por una sola de tus caricias todo lo diera,
aunque volvieras de nuevo a irte lejos de mi.

Dónde estás, qué cielo cruzas sin extrañarme nube perdida,
por qué no vienes a iluminarme luz de mi vida,
regresa pronto que yo no vivo si no es por ti.

Dónde estás, detén tu vuelo y vuelve a casa nube viajera,
por una sola de tus caricias todo lo diera,
aunque volvieras de nuevo a irte lejos de mi.


MANTELITO BLANCO
Mantelito blanco de la humilde mesa
donde compartimos el pan familiar.
Mantelito blanco hecho por mi madre
en horas de invierno de nunca acabar.

Tienen sus dibujos figuras pequeñas
avecillas locas que quieren volar.
Las bordó mi madre en aquellas noches
que junto a mi cuna me enseñó a rezar.

Hay dos letras grandes en el mantelito,
letras veneradas que no he de olvidar.
Son las iniciales de mis dos viejitos
que unidos por siempre, por siempre estarán.

Tienen sus dibujos figuras pequeñas
avecillas locas que quieren volar.
Las bordó mi madre en aquellas noches
que junto a mi cuna me enseñó a rezar.
Las bordó mi madre en aquellas noches
que junto a mi cuna me enseñó a rezar.

Tienen sus dibujos figuras pequeñas…


SOBRE LA CRUZ
Cielo azul cielo estrellado,
hermosa luna plateada,
ustedes son los testigos
de mi alma desesperada.

Yo sé que hay un mar inmenso
y sé que hay un sol muy alto,
pero nadie me había dicho
que también hubiera llanto.

Cuando se pierde un cariño
cuando se pierde un amor,
es igual que estar clavado
sobre la cruz de un calvario
por el mundo abandonado.

Estrellita de mis noches
lucero de mi alborada,
ya mi corazón se muere
y no los veré mañana.

Yo se que amar es hermoso
dichosos los que se quieren,
Dios quiera que nunca sientan
las penas de los que mueren.
Cuando se pierde un cariño…


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